- revistareporte
Idealismo y Materialismo
Autor: José Carlos Villalobos Ávila.

¿De dónde venimos? Tal es el problema fundamental que plantea la filosofía. Los que afirman que venimos de la creación de un ser supremo se llaman idealistas. Estos creen que Dios hizo al hombre y de su conciencia se produjo todo el mundo, o el universo que nos rodea. Por otro lado, los que creen que provenimos de la evolución, de la materia, del continuo devenir provocado por el cambio biológico a través de millones de años sobre el universo, son materialistas.
Unos y otros sostienen sus respectivas teorías. Sin embargo, jamás se llegarán a poner de acuerdo en la respuesta a la problemática antes mencionada por la simple razón de que unos se basan en lo subjetivo, estos son los idealistas; y otros en lo concreto, en lo objetivo, lo que es tangible. Estos son materialistas.
Es que la filosofía no es unívoca, es decir, no podemos adjudicar un mismo significado siempre; existen muchos tipos de filosofías. Un estoico no es igual a un epicúreo, aunque ambos sean filósofos.
Por eso la filosofía no admite una sola definición, no es algo técnico, no es ciencia comprobable. Entonces, el recurrir a éstas dos vertientes hace que sea más sencillo explicar la disciplina.
Pero vuelve la inquietud de la explicación en este punto. Si intentamos definir la procedencia del ser, tenemos que apoyarnos en un fundamento. Me explico, desde el punto de vista idealista, se tendría que lograr un razonamiento epistemológico (entendimiento) mediante entes no corpóreos. Se necesitaría, por fuerza un conocimiento intersubjetivo entre estos entes. En otras palabras, trataríamos con espíritus, o fantasmas en el que el entendimiento se dé a partir de telepatía, u otras maneras no tangibles. Tal es el caso de la religión, o dogmas de cualquier tipo. El entendimiento mutuo por esta vía sería por intuición, extrahumano completamente.
Por otro lado, los materialistas convergen en lo objetivo, en lo tangible. Se establece una causalidad transitiva entre humanos. Es decir, entre cuerpos concretos, que tienen forma y ocupan un lugar en el espacio. Precisamente, el materialismo es aquello que reconoce la realidad de los cuerpos. Los toma como punto de partida para un entendimiento real. Es la referencia a lo concreto, a la utilización de la razón en función del conocimiento. Por lo tanto, es un tema gnoseológico, o sea que, parte de principios y fundamentos mediante una extensión y métodos del conocimiento humano. Desde luego, aceptando que hay, para esta explicación dos vertientes, la asertiva y la exclusiva. La asertiva, que es de la cual hacemos referencia, reconoce para su análisis, como hemos puntualizado antes, a la realidad de los cuerpos. La exclusiva, por el contrario, tiene que ver más con el corporeísmo, sostiene que toda explicación proviene de los cuerpos, pero se analizan variables como peso, masa, etcétera. A esta definición no nos referimos.
Por eso cuídate de discutir con alguien idealista, si eres materialista, o viceversa. Porque resultaras como Heráclito y Parménides, o sus seguidores, que desde hace cientos de años no se ponen de acuerdo.
En sus afirmaciones solo podemos observar que unos siguen siendo la antítesis de otros.
Y tú, ¿eres Idealista o materialista? (Materialismo y Delirio, 2018)
Referencias:
Materialismo y Delirio. (13 de Agosto de 2018). Obtenido de https://www.youtube.com/watch?v=cXCSgje7AJc